Los cambios de rasante de reducida visibilidad pertenecen a ese tipo de escenarios especialmente sensibles para nuestra seguridad, donde deberemos adoptar un posicionamiento estratégico en el tráfico.
Para conducir con seguridad, permaneceremos a la espera de lo inesperado, centraremos nuestra trayectoria en nuestro propio carril, dejando margen en el lado derecho y en el lado izquierdo y adaptaremos la velocidad a la posibilidad de poder detener nuestra motocicleta en caso de necesidad. De esta forma, dispondremos como norma general de un mayor espacio de reacción.
Los principales riesgos asociados a este tipo de escenarios son:
· Posible presencia de vehículos inmovilizados en el arcén o circulando a velocidad anormalmente reducida por el mismo. En ocasiones pueden ocupar parte de la calzada.
· Incorporaciones desde caminos adyacentes con invasión de nuestra trayectoria a velocidad anormalmente reducida de otros vehículos.
· Invasión de nuestra trayectoria por vehículos que circulan en sentido contrario en el transcurso de una maniobra de adelantamiento.
· Presencia de obstáculos por caída parcial o total de la carga de un vehículo.
· Presencia de retenciones de tráfico por incidencias u obras (cola de retención).
Recuerda que no todos los cambios de rasante de reducida visibilidad están señalizados como tales. La administración también infringe, así que observa, razona y no te juegues la vida.
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