Los paneles laterales también se renuevan con un diseño puntiagudo y afilado que se extiende pronunciadamente hacia delante hasta los bordes de la horquilla. Esto dota a la nueva Super Duke R de una apariencia más agresiva y compacta, a pesar de que las dimensiones, el chasis y el motor siguen inalterados.
A nivel técnico se esperan nuevos ajustes en el motor para asegurar la homologación Euro4 manteniendo la potencia actual en los 173 CV pero a más revoluciones 9.500 rpm (+635 rpm). El par motor máximo también se mantiene pero lo consigue a 1.000 rpm menos (6.750 rpm). El paquete de electrónica vendrá actualizado con la última tecnología en control de estabilidad y ABS en curva de Bosch.
También es probable que monte (de serie o en opción) la suspensión WP semiactiva de la Super Duke GT.
Finalmente, montará un nuevo panel de instrumentos con toda la información integrada en una sola pantalla TFT. La zaga, aparentemente, es lo que menos varía.