Así las cosas, los rumores siguen plenamente vigentes, como se desprende de la última información aparecida en el portal financiero Bloomberg. Según Matthias Mueller, CEO de Volkswagen, el grupo automotriz revaluará todas sus filiales a nivel global en los próximos meses.
Se ha hablado mucho sobre la idoneidad de tener bajo su paraguas a marcas de tan escasas ventas como Bugatti, pero también de las pocas sinergias que se pueden lograr con marcas de motos como Ducati, o de camiones como Scania y MAN.
Menos probable es que el gigante alemán de la automoción decida desprenderse de la prestigiosa marca de deportivos Lamborgini o de la elitista marca británica Bentley. Pero en principio todas las cartas están sobre la mesa y una reestructuración parece probable.
Para el caso de Ducati hay que considerar que es una firma saneada y rentable, que necesita de poca o ninguna ayuda de la casa matriz. En 2015 Ducati logró unos ingresos de 702 M€, con un beneficio (EBIT) de 54 M€.
Hay que reconocer que Ducati se las ha ingeniado sola para la inversión en I+D necesaria de cara a lograr la homologación Euro 4 en todos sus modelos, por lo que la firma italiana pisa fuerte de cara al futuro.
Evidentemente, Ducati no le hace daño a Volkswagen en estos momentos, pero el Grupo alemán es una empresa de 213.000 M€, en la que Ducati solo representa el 0,3% de sus ingresos totales. De esta aparente insignificancia y de la necesidad de obtener capital en el corto plazo podría venir su mayor vulnerabilidad.
Seguiremos el proceso de decisión en próximas fechas… Ducati sí, Ducati no…!