El 7 de septiembre se reunieron representantes de la Unión Europea (UE), fabricantes y miembros de las asociaciones de motoristas para la elaboración de políticas específicas de seguridad vial, que permitan disminuir la alta siniestralidad y la vulnerabilidad de los usuarios.

La asamblea ha sido convocada por la Asociación de Fabricantes Europeos de Motocicletas (ACEM), y ha servido para la puesta en común de propuestas y soluciones que permitan afrontar la situación de la moto en la UE.

Entre los asistentes hay representación española en la forma de José María Riaño, secretario general de la Asociación de Empresas del Sector Dos Ruedas (ANESDOR), quién reclamó política específicas para la moto al considerar que el enfoque actual es ineficaz. A pesar de ello, Riaño recordó que desde 2007 al 2015, las víctimas mortales en accidentes de motocicleta se han reducido en un 48%.

Inés Ayala, titula en la Comisión de Transportes y Turismo de la Eurocámara, insistió en la urgencia de llevar a cabo acciones que sobrepasen el ámbito de cada país, llevando la iniciativa a las instituciones comunitarias. En opinión de Ayala, faltan infraestructuras, políticas que permitan la renovación del envejecido parque de motocicletas, etc.

Y Antonio Avenoso, director ejecutivo del Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte, quien comentó por su parte que conducir una motocicleta sigue siendo una actividad con un “nivel de riesgo inaceptable”. Las motocicletas cuentan con numerosos beneficios desde el punto de vista del transporte, por ello considera imprescindible que los que quieran comprar una motocicleta puedan hacerlo y utilizarla con seguridad.

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