Las dos compañías lideran el mercado japonés, pero fuera  de sus fronteras la competencia es feroz, especialmente en Europa y EE UU donde tienen que competir con fabricantes taiwaneses como Kymco o SYM, auténticos superventas mes tras mes.

Las dos marcas que en los años 80 liberaran la denominada “Guerra HY” por el dominio del sector de las dos ruedas en Japón, ahora unen sus fuerzas para hacer frente a un mercado cada vez más competitivo.

En virtud del acuerdo, Yamaha trasladará la producción de sus scooter de 50 cc desde la planta de Taiwán a la que posee Honda en Kumamoto (Japón). De este modo se dejarán de importar 50.000 scooter, que pasarán a fabricarse directamente en territorio japonés a partir de 2018. Esto permite a Honda incrementar la productividad de una fábrica que se ideó para fabricar 200.000 unidades anuales y que actualmente solo produce 156.000.

Y todo ello en un contexto en el que las matriculaciones de motos en Japón cayeron un 10,6 % en 2015 en su segundo año de caída. Aún peor es el retroceso del 15% para el caso concreto de los ciclomotores, o que Suzuki Motor también produce scooter a precios muy competitivos.

A este acuerdo se une el diseño y producción conjunta de un modelo de 50 cc de nueva factura, que irá destinado a los servicios de entrega de mercancías. También se contempla el diseño de scooter eléctricos con los que se espera cumplir con las nuevas normas medioambientales de Europa y Estados Unidos.