La parte superior de la dirección se ha sustituido por una gran pieza de aluminio que permite realizar los ajustes cambiando el ángulo de incidencia de la horquilla a la par que se puede configurar el manillar. Esto permite simular diferentes diseños del chasis en su configuración delantera.
Lo mismo podemos encontrar en el brazo oscilante posterior, que acaba en una gran pieza de aluminio configurable para poder alargar o acortar la distancia entre ejes. En el reposapies encontramos una placa similar de aluminio. En su caso se encarga de variar la posición del pie del piloto.Y en el bastidor auxiliar también encontramos una estructura de aluminio para alargar-acortar la distancia en caso necesario.
A parte del chasis, otros detalles interesantes es que el radiador de la Tiger ha sido sustituido por dos separados y que el motor incorpora un silencioso de mayores dimensiones… ¿incremento de cilindrada sobre los 765 cc originales? Aunque el depósito de combustible parece que no sufre cambios y mantiene los 19 litros de capacidad.
Todo parece indicar que estamos ante una versión que se inclina más por una utilización en carretera frente a la opción off-road pura. Lo que explicaría la menor altura al suelo y el aparentemente menor recorrido de las suspensiones.
En cualquier caso, este tipo de pruebas se realizan en los momentos iniciales de desarrollo por lo que es poco probable que vayamos a ver una nueva generación de la Tiger hasta al menos dos o tres años.