Esos 50 radares de la lista recaudaron el 30% de los 164,2 millones de euros en multas impuestas por los 600 radares en funcionamiento en el territorio bajo competencia de Tráfico (excluyendo a Cataluña y Euskadi que tienen las competencias transferidas).
El radar que más multa de España recauda 450 euros a la hora. Se trata de un cinemómetro situado en el kilómetro 417,5 de la A-4. Es una zona con límite 80 km/h a corta distancia de un tramo con límite 100 km/h. Esta peculiaridad le ha hecho cursar 80.582 denuncias en 2016.
El 62% de los radares del top 50 se encuentran colocados en autovías y autopistas. Son zonas en las que los usuarios de la vía no perciben el riesgo o la necesidad de reducir la velocidad drásticamente, en muchos casos el límite está fijado en 80 km/h.
Un ejemplo de esto último lo tenemos en el radar de tramo situado en el túnel de la A7 de Lorca (Murcia). Este es el radar de tramo más rentable para la DGT, con un ingreso que superó los 2,1 millones de euros el año pasado.
A pesar del fuerte incremento del número de multas (3,8 millones de denuncias en 2011 frente a los 4,3 millones de 2016) el Gobierno indica que España es uno de los países de la UE con menor número de radares por cada millón de habitantes, 27 frente a los 56 de la media de la UE, o los 62 de nuestra vecina Francia. En países como Reino Unido y Suecia se alcanzan los 93 y los 135 respectivamente.
En relación al número de radares por kilómetro cuadrado, España tiene 2,5 por cada 1.000 kilómetros cuadrados, frente a los 7,3 de la media de la UE, o los 38 de Holanda, 57 de Italia, 72 de Irlanda o 662 de Bélgica.
Además, aunque el número de multas crece, el importe recaudado disminuye: 395 millones de euros en 2016 frente a 458 millones de euros en 2011. Esa disminución se debe en parte a que la mayor parte a que un mayor número conductores denunciados se acoge al prontopago para reducir el importe.
60 nuevos radares
Lejos de disminuir, el número de radares seguirá creciendo en un futuro próximo. A principios de año se anunció la colocación de 60 nuevos cinemómetros fijos cuya situación obedecería a nuevos criterios. Según un estudio de la Unviersidad de Valencia, en los lugares con radares la siniestralidad disminuye una media del 22%.
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