Tanto Javier como su hermano Martín cursaron la carrera de ingeniería en Barcelona tras finalizar la Guerra Civil, y comenzaron a fabricar vehículos industriales.

Pero lo que realmente les apasionaban eran las motos, un medio de transporte que consideraban sería muy útil en la España de posguerra. Una España desolada en la que no existían las motos Vespas, ni la competencia japonesa, alemana o inglesa. Por ello fundaron SANGLAS en 1942, convirtiéndose en pioneros de la industria de la moto en nuestro país.

Su intención era crear una moto de gran cilindrada para la época. Se decidieron por los 350 cc (14,4 CV) y por los 4T, porque las motos de dos tiempos consumían mucho. El motor evolucionó hacia la SANGLAS 400, su modelo más nombrado, y la SANGLAS 500 (1952). Sus sencillos motores monocilíndricos refrigerados por aire disfrutaron de cierto éxito y no fue hasta los años 80 cuando SANGLAS comenzó a incorporar motores japoneses de Yamaha. En 1981 cesó la producción.

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