Desde la alemana BMW Motorrad hasta la austriaca KTM, las motos de aventura ya vienen de fábrica con la posibilidad de equipar una gran cantidad de accesorios. Quizá esa es una de las razones por el que el gigante alemán de los accesorios haya hecho pública la mala noticia.

Aunque la principal razón parece ser la muerte por excesivo éxito. El incremento de los modelos en el mercado llevó a Touratech a planear la expansión de su actividad. Ello se tradujo en la apertura de un nuevo centro de logística y al incrementó de la producción. Pero los planes se vinieron abajo prematuramente tras los problemas surgidos para la impresión de sus grandes catálogos de más de 400 páginas. Esto afecto a toda la cadena desde la logística hasta la producción y ha llevado finalmente a la bancarrota.

La compañía con base en Niederechach está próxima a la insolvencia económica, según comunicó el encargado de comunicaciones, Ingo Schorlemmer. Los empleados han sido informados por la propia junta directiva, aunque se han podido pagar los últimos sueldos.

Ahora se abre una etapa difícil en la que se deberán testar las posibilidades de reestructuración y buscar nuevas vías de financiación de la actividad. El modelo de negocio deberá ser reestructurado desde sus fundamentos, para el desarrollo de un plan viable de cara a los próximos años.

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