Saroléa surgió como una empresa de armas en 1850 y tras pasar a producir bicicletas y motocicleta desapareció por problemas económicos en los años 60 del siglo XX.
En 2008 volvió a la vida de la mano de los hermanos belgas Torsten y Bjorn Robbens con una vertiente puramente eléctrica. Su primer modelo se involucró en la comepitición, y más concretamente en el TT Zero de la Isla de Man en 2014. Su competitividad en la clase eléctrica ha estado fuera de duda hasta el momento, así como su estilosa figura con ciertos tintes vintage de las motos de competición a la antigua usanza.
Ahora Saroléa quiere dar el salto a la producción en serie y lanzar un modelo para todos los públicos basada en su experimentada moto de carreras SP7. Un modelo bautizado como Manx7 que podría estar disponible para finales de año o principios de 2018.
La Manx7 será una dura rival de la Lightning LS-218. Su peso es de tan solo 195 kg con una batería de 14 kWh y una autonomía de 230 km. Los que se decidan por este modelo tendrán a su disposición varias opciones de batería que incrementan la autonomía hasta los 280 km con la de 18 kWh y hasta los 330 km con la de 22 kWh. Claro que eso incrementa su peso y disminuye sus prestaciones. Dependiendo del uso que se le vaya a dar los distintos packs de baterías permiten utilizar a la Manx7 en el rango óptimo de prestaciones.
Como ocurre con la Lightning estamos ante una moto del más alto nivel de calidad y equipamiento, entre los extras destaca la conectividad 4G, ruedas de magnesio o de fibra de carbono, y la posibilidad de que la moto sea fabricada de forma completamente personalizada.
Las suspensiones son una horquilla FGRT-200 de Öhlins y un amortiguador trasero TTX36, mientras que la francesa Beringer se encarga de los frenos Aerotec, y OZ Racing de las ruedas de aluminio ligero Piega.
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