La nueva campaña de vigilancia y control también tratará de concienciar a los conductores de los riesgos que suponen la circulación en vías convencionales, especialmente con las distracciones durante la conducción, mediante una campaña paralela en los medios de comunicación.

Durante los próximos días se realizarán un mayor número de controles de velocidad, así como controles de alcoholemia, papeles del vehículo, ITV, y uso del móvil.

Mientras en las redes sociales como Twitter, Facebook, YouTube e Instagram, se informará sobre los principales riesgos mediante infografías o vídeos.

 

Las estadísticas hablan por sí solas

De las 1.810 personas fallecidas en carretera convencional en 2016, el 75% lo hizo en una carretera convencional, además de 3.930 personas  heridas.

Estas vías son más peligrosas porque los vehículos que circulan en ambos sentidos pueden llegar a chocar frontalmente, pero también porque las intersecciones e incorporaciones están al mismo nivel, los trazados son más antiguos, el asfalto y la señalización se encuentran en peor estado conservación, hay más estrechamientos, curvas peligrosas y desniveles que en una autovía.

Finalmente, son carreteras en las que convergen usuarios a velocidades muy diferentes; peatones, ciclistas y tractores, conviven con los habituales conductores de motos, automóviles y camiones; y en las que se puede producir con mayor facilidad el cruce de animales domésticos o no.

Así tenemos que de los 964 fallecidos en vías convencionales, 375 fueron por salida de la vía, 241 por colisión frontal y 87 por atropello.

Fuente: DGT