Para hallar el origen de la denominación Trophy (Trofeo) hay que remontarse hasta el primer modelo de 1949 (TR5), (Steve McQeen y James Dean fueron algunos de sus afortunados propietarios). Como se aprecia en la imagen su concepto era muy diferente al actual, una moto naked con mecánica monocilíndrica.
Tras una larga saga, la firma inglesa recupera ahora la denominación Trophy para designar a su Gran Turismo, en sustitución de la actual Sprint. La intención es competir de tú a tú con el modelo más vendido del segmento touring en el mercado: la BMW R 1200 RT.
La llegada de novedades desde Hinckley no paran, ante la crisis la mejor estrategia es lanzar novedades para todos los gustos. Así en pocos meses hemos visto la Speed Triple R y la Explorer, y ahora llega con una rutera de primer nivel. Su mecánica es el mismo tricilíndrico (1.215 cc) de la Explorer, con 134 CV (convirtiéndose en la tercera más potente del segmento). La transmisión se la encomiendan a un cardan abrazado por un chasis de doble viga de aluminio de renovada factura.
La nueva Trophy 1200 se fabricará en dos versiones, la estándar y la SE, más equipada. Para su concepción se ha partido de cero, aunque se tomara como base el motor tricilíndrico y la trasmisión de la Explorer 1200. Al motor le han añadido un eje de equilibrado para aumentar la suavidad en su funcionamiento, y lo último en tecnología, como el control de tracción o un puño de gas electrónico "ride by wire". Su potencia de 134 CV ha sido muy dulcificada, su par motor ha sido mejorado, se le ha añadido además una 6ª velocidad de desarrollo largo para viajar a punta de gas con la mínima rumorosidad.
Como no podía ser menos, la Trophy 1200 equipa de serie acelerador electrónico, control de crucero (se opera desde la piña derecha), control de tracción (desconectable), frenada combinada (el freno delantero actúa parcialmente cuando pisas el pedal), ABS (al contrario que en la Explorer, no es desconectable), toma de corriente (12V) y pantalla con regulación eléctrica como principales “gadgets”.
La aerodinámica ha sido estudiada para minimizar turbulencias, algo fundamental en viajes largos. Los asientos se adaptan a todas las alturas gracias a sus diferentes posibilidades de regulación y también cuenta con elementos ruteros tan prácticos como la guantera con cierre centralizado, el caballete central, el depósito de 26 l. o el Sistema de Equipaje Dinámico TDLS (las maletas basculan 5º para mejorar la agilidad de la moto en curva).
Y para que quede constancia de que se ha pensado en todos los detalles de cara al futuro propietario, Sus intervalos de mantenimiento han sido optimizados hasta los 16.000 km y las revisiones de calado se dilatan hasta los 32.000 km, y Triumph ha añadido también un catálogo de accesorios con los que completar aún más la Trophy, como pueden ser los puños/asientos calefactables, el navegador, la bolsa sobre-depósito, el top-case de 55 l. o el candado específico de Triumph. La podremos ver en los concesionarios a partir del mes de octubre.