En rueda de prensa, el conseller de Interior de la Generalitat, Felip Puig, que ha estado acompañado por el director del Servei Català de Trànsit (SCT), Joan Aregio, y el comisario de los Mossos d'Esquadra Miquel Esquius, han explicado que se trata de la primera vez desde hace más de una década que la siniestralidad en Cataluña sufre un repunte, aunque ha pedido que se mire la tendencia a medio y largo plazo "porque varios accidentes múltiples pueden ofrecer una realidad distorsionada".

Ante este escenario, los Mossos d'Esquadra incrementarán los controles de tráfico simultáneos en una misma carretera y los controles "en paquete" de alcohol y drogas, velocidad y el mantenimiento del vehículo, así como el patrullaje en moto y con vehículos no logotipados, y la rotación de los radares fijos hasta un 25%.

Además, un conductor que tenga en el último año dos multas por una infracción grave y que reincida será sancionado con una multa un 30% más cara, en casos como adelantamientos invadiendo el sentido contrario en puntos con poca visibilidad, circular a más de 190 km/h, conducir ebrio o drogado y no llevar el cinturón, ya que a partir de ahora se aplicará el artículo 68 de la Ley de Seguridad Vial, una modificación incorporada en 2010.

104 MUERTOS.

Entre el 1 de enero y el 24 de junio han muerto 104 personas en accidente de tráfico en Cataluña, siete más que en el mismo periodo de 2011, lo que supone un aumento del 7,2%, y si se añaden los heridos graves, la cifra asciende al 9,9%, con 565 víctimas mortales y graves frente a las 514 del primer semestre de 2011.

El director del SCT ha detallado que entre 2007 y 2012 ha caído la movilidad en las autopistas y autovías entre un 15 y un 20% y en el resto entre un 5 y un 6%, y desde 2010, la movilidad en autopistas ha caído un 7% y en el resto un 4%, mientras que la velocidad media ha aumentado entre 1,5 y 2 kilómetros por hora.

Según el análisis de Trànsit y los Mossos d'Esquadra, las principales causas del aumento de la siniestralidad son la velocidad excesiva e inadecuada como consecuencia de que las carreteras están más vacías, y el mantenimiento deficiente de los vehículos y envejecimiento del parque automovilístico.

Asimismo, el aumento de la movilidad relativa en las carreteras secundarias y no desdobladas, que son gratuitas, en detrimento de las autopistas y autovías, con un desplazamiento del tráfico en torno al 4% a vías donde un accidente puede tener consecuencias mucho más graves, y el aumento de las conductas de riesgo y las distracciones.

De hecho, según el conseller, han repuntado las conductas de riesgo al volante y en los accidentes, cada vez tiene más incidencia el factor humano, porque si hasta ahora las distracciones y la falta de atención eran la causa en el 18% de accidentes, ahora suponen el 23%.

El plan de choque se centrará principalmente en las carreteras N-II, C-35, C-25, C-55, C-15, N-340 (tramo norte y sur), C-14, N-240, C-12 y C-13, donde se acumulan el 25% del total de muertos y heridos graves en accidente en la red vial catalana, unas vías que han asegurado que en general están en buen estado.

Con todo, el conseller ha hecho un llamamiento "a recuperar el nivel de atención en la conducción" sobre todo de cara al verano, cuando aumentan los desplazamientos por vacaciones y el turismo y tradicionalmente la siniestralidad aumenta.

"Estamos en una lucha sin cuartel", ha indicado el conseller, que ha puntualizado que el aumento de controles no significará necesariamente poner a más policías en las carreteras sino que en función de las prioridades y del diseño de los planes territoriales los desplegarán en unas vías u otras.

Preguntado sobre las cifras que dio la directora general de Tráfico (DGT), María Seguí, que situaba el incremento de la cifra de muertos en accidente en Cataluña en un 17%, Aregio ha sentenciado que las cifras son competencia del SCT y que se produjo un error en el cómputo que hizo la DGT.

Además, Puig ha respondido que desde la DGT no ha habido "ningún toque de atención" por la siniestralidad en Cataluña y ha citado el aumento de siniestralidad en otras comunidades como Castilla La Mancha (aumento del 10%), Navarra (143% más), Baleares (13% más) y Canarias (50% más), que sí dependen de la DGT.