Así lo ha explicado en un comunicado, en el que el Gobierno gallego ha detallado que de los 618 millones de euros movilizados, un total de 398 se destinó a obras que ya han sido finalizadas; mientras que otros 219 a actuaciones que están en ejecución.
En este sentido, ha recordado que Galicia es la cuarta comunidad autónoma en kilómetros de carreteras por lo que la seguridad viaria "es una prioridad". Por ello, ha apuntado que la inversión permite que la Axencia Galega de Infraestruturas trabaje en dos líneas de actuación, la mejora de las infraestructuras y las acciones orientadas a la concienciación social.
REDUCIR VEHÍCULOS EN CENTROS URBANOS
Dentro de la primera línea de actuación, la Xunta ha destacado la ejecución y construcción de las variantes de población, que implican la creación de nuevos trazados que evitan el paso por los cascos urbanos. Así, se consigue convertir las travesías actuales en tramos estrictamente urbanos, humanizando el vial y reduciendo la conflictividad.
En lo que va de legislatura se pusieron en servicio un total de 27,77 kilómetros de variantes de población que supusieron un total de 104,3 millones de euros. Asimismo, en obras están actualmente 19,76 kilómetros con una inversión de 113,63 millones de euros, y en proyecto o planificadas están, además, un total de 57,76 kilómetros con inversión de 191,58 millones de euros.
MEJORA DE CARRETERAS
Otra de las actuaciones por las que apuesta la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras es realizar obras de mejora y acondicionamiento de carreteras para promover vías seguras.
Para ello, el departamento autonómico ha explicado que está aumentando la seguridad gracias a las inversiones realizadas con estos fines y que ascienden a un total de 340 millones de euros en estas legislatura.
TRAMOS DE CONCENTRACIÓN DE ACCIDENTES
Además, la Consellería que dirige Agustín Hernández también ha considerado "imprescindible" actuar en los puntos negros para mejorar la seguridad vial.
Con este fin, ha detallado que, en estos momentos, la Xunta realiza 13 obras de eliminación de este tipo de tramos que actúan en unos 22 kilómetros de la red de carreteras autonómica y que suponen una inversión de 35 millones de euros.