Las ayudas directas a la compra de motos, reguladas a través del Plan Moto-E, se prorrogan hasta final de año, según un Real Decreto aprobado en el último Consejo de Ministros.
La dotación del plan, nueve millones de euros, se mantiene tal cual. Según las estimación de la agencia reguladora de las ayudas, se ha consumido una cuarta parte de esa cantidad. El Plan Moto-E está a punto de cumplir un año de existencia, pero no ha sido muy bien aprovechado por la falta de apoyo por parte de los gobiernos autónomos.
De esta manera se quiere seguir apoyando al sector de la moto y que el mercado pueda recuperarse de esta crisis.