Michael Schumacher no puede negar que por sus venas circula gasolina de alto octanaje. A sus 44 años ama tanto la competición que cada cierto tiempo vuelve a tener la necesidad de sentirse piloto.
Esa dependencia le "obligó" a pedir la "readmisión" en la Fórmula 1, donde lo dio todo y logró siete títulos mundiales. Pero la edad no perdona y en el trienio de su regreso sólo pudo sumar un podio. Al "káiser" también le vuelven loco las motos. De hecho en su paréntesis con la Fórmula 1 probó fortuna en el campeonato IDM alemán de Superbikes, donde llegó a sumar un podio en una carrera en la que se mezclaban pilotos aficionados y profesionales.
Ahora, retirado de nuevo del "circo" de la F1, "Schumi" ha vuelto a subirse en el Circuit Ricardo Tormo a su moto, en unos entrenamientos privados en los que tan sólo busca el placer de conducir en circuito y pasarlo bien. Rodó ayer y lo hará hoy, pero no se hagan ilusiones, con 44 años, Schumacher ha entendido que ya no es tiempo para competir en motos.
Con su propia moto
Michael Schumacher rodó ayer en Cheste con su propia moto, una Honda CBR 1000RR asistida por el equipo Holzhauer Racing, en unos entrenamientos en los que compartió pista con otros pilotos del IDM Superbike y otros del Mundial de Resistencia.
El viento no facilitó a los pilotos su jornada de entrenamiento, pero Michael Schumacher aprovechó toda la jornada para pilotar su Honda calzada con neumáticos Dunlop. El alemán se mostró encantado con el nuevo asfalto del trazado valenciano y según pudo saber este periódico rodó en 1:40.5, lo que no está nada mal para un "viejo rockero" de 44 años.
Se trata de la segunda vez que Michael Schumacher rueda en el Circuit Ricardo Tormo con una moto, ya que en noviembre de 2007 tuvo la oportunidad de probar la Ducati Desmosedici campeona del mundo con Casey Stoner. El alemán conoce a la perfección el trazado de Cheste, en el que también ha entrenado en numerosas ocasiones con un Fórmula 1. Schumacher sufrió un grave accidente en moto en el año 2009 en el circuito de Cartagena, donde se rompió dos costillas y sufrió un esguince cervical. En otras carreras en Alemania también sufrió alguna que otra caída.