Tras cuadruplicar su cifra de negocio y cerrar el ejercicio 2016 con una facturación de 2,2 millones de euros, desde Scutum se buscará duplicar esa cantidad en 2017. Además se lanzará en España la nueva marca comercial Silence, que ya utilizan para las motos que exportan al extranjero.
En marzo podría inaugurarse la planta de fabricación de motos eléctricas de Molins de Rei (Barcelona), con la que se ampliará la capacidad de producción hasta las 10.000 unidades anuales. La fábrica contará con dos líneas de producción, una para el ensamblaje del vehículo y otra para la integración de la batería, de la que saldarán los primeros vehículos en 2018.
Son objetivos ambiciosos, teniendo en cuenta que el año pasado se comercializaron alrededor de 500 motos, de las que 316 se vendieron en España y el resto en el extranjero (Gran Bretaña e Italia).
Al final de año se lanzará un nuevo modelo, el Scutum S01 adaptado al uso por parte de particulares y la característica batería extraíble que facilita la recarga en cualquier parte. Además se espera ampliar la red comercial en el extranjero con la incorporación de puntos de venta en Alemania, Francia, Bélgica y Holanda.
Fuente: Scutum